El uso de anticonceptivos hormonales es generalmente la forma más eficaz de reducir o detener la menstruación. Las opciones disponibles son:
- Contraceptivos que contengan estrógeno y progestágeno en la fórmula, sean comprimidos, anillo vaginal o parche transdérmico;
- Inyección de Medroxiprogesterona (Depo Provera®);
- DIU (dispositivo intrauterino) hormonal.
Los anticonceptivos que contienen sólo progestágeno también son capaces de suprimir la menstruación, pero en los primeros meses de uso presentan una probabilidad mayor de ocurrencia de sangrados no programados y escapes.
Otras medicaciones que no son anticonceptivos hormonales pueden detener la menstruación (Danazol, análogos de la hormona de crecimiento, antagonistas y moduladores del receptor de progesterona, etc), pero normalmente se indican cuando hay alguna patología asociada que está siendo tratada y la ausencia de menstruación es un efecto secundario del uso de esta medicación. Estos medicamentos no se utilizan con el fin exclusivo de suprimir la menstruación.
La retirada del útero, histerectomía, es otra situación en la que la mujer deja de menstruar. Normalmente, esta cirugía se indica en presencia de patología uterina que justifique la remoción del útero.
El uso de anticonceptivos hormonales presenta algunas contraindicaciones y debe ser prescrito por el ginecólogo, clínico general o médico / a de familia.
