¿Cuáles son los tipos de trastorno de personalidad y sus características?

Respuesta de experto:

Los trastornos de personalidad pueden ser clasificados en 8 tipos: Paroide, esquizoide, antissocial, emocionalmente inestable (Impulsivo, Borderline), histriónico, obsesivo-compulsivo, evitable y dependiente.

Estos trastornos pueden dividirse en tres grupos:

Grupo A: paranoides, esquizoides y esquizotípicos. Estos individuos son los considerados "excéntricos" y "extraños".

Grupo B: antisociales, fronterizos, histriónicos y narcisistas. Estas personas tienen personalidades dramáticas, emotivas y volubles.

Grupo C: incluye los dependientes, los evitativos y los obsesivo-compulsivos. Se tratan personalidades ansiosas y con tendencia al miedo.

Trastorno de la personalidad paranoide

Son desconfiados y sospechosos de los demás, interpretando las intenciones de terceros como malvadas. Creen que están siendo explotados, maltratados o engañados, pues tienen dudas infundadas sobre la lealtad o confiabilidad de otras personas.

La reticencia del individuo en confiar en los demás también es debida a un miedo sin fundamento de que puedan utilizar informaciones contra él.

Hay interpretaciones de significados ocultos en observaciones y acontecimientos sin maldad, que parecen ser humillantes o amenazadores para la persona.

Es común guardar rencores, siendo implacables con cualquier tipo de insulto o deslices. Reacciona con rabia o atacando rápidamente cuando interpretan cualquier tipo de ataque a su carácter o reputación, aunque la situación parezca inofensiva y sin malas intenciones a los ojos de terceros.

También desconfían con frecuencia de la fidelidad de su cónyuge o pareja.

Trastorno de la personalidad esquizoide

Se caracteriza por la poca expresión de emociones y el distanciamiento de las relaciones sociales, sin deseos de tener relaciones más íntimas o incluso tener una familia.

Son personas que prefieren realizar actividades solas y pocas veces sienten placer en lo que hacen. No suelen tener amigos cercanos, a no ser sus parientes de primer grado.

Elogios o críticas no afectan a personas con trastorno de personalidad esquizoide, que demuestran distanciamiento, frialdad y poca apertura afectiva.

Trastorno de la personalidad esquizotípica

Este trastorno de personalidad perjudica las relaciones sociales e interpersonales, ya que provoca gran incomodidad y poca capacidad para tener relaciones íntimas.

Son personas que presentan distorsiones en la cognición o percepción, comportamiento o apariencia excéntrica, creencias extrañas o incluso pensamientos fantasiosos que interfieren en el comportamiento, haciéndolo desajustado a su entorno cultural.

Pueden tener aún ilusiones, discurso bizarro, desconfianza y manifestar poco afecto. Presentan una enorme ansiedad social, que permanece incluso después de familiarizarse con las personas. Esta reticencia a socializarse normalmente está relacionada con miedos paranoides y no a una visión negativa de ellos mismos.

Trastorno de la personalidad antisional

Se caracteriza por la falta de respeto y la violación de los derechos de los demás. Estos individuos no pueden adecuarse a las reglas de la sociedad, en particular a las leyes, cometiendo actos ilícitos repetidamente.

La irritabilidad y la agresividad son características marcadas, con tendencia a peleas o agresiones físicas. También no respetan de forma irresponsable la seguridad personal y ajena.

Tienen tendencia a engañar, mentir, usar nombre falso o aprovecharse de terceros para conseguir placer o ventajas personales. Cuando hacen mal a alguien no presentan remordimiento, actuando con indiferencia o justificando el acto.

Son personas irresponsables y por eso fracasan constantemente en los trabajos o en el cumplimiento de los deberes financieros.

Trastorno de la Personalidad Borderline

Las personas con trastorno de la personalidad borderline son inestables en las relaciones personales, en la autoimagen y en la afectividad. Son muy impulsivos y hacen grandes esfuerzos para evitar ser abandonados, ya sea en la realidad o en la imaginación.

Las relaciones personales son intensas y poco estables, alternando períodos de idealización y devaluación.

Los individuos borderline poseen perturbaciones de identidad, con mucha inestabilidad y resistencia en la auto-imagen o en su propio "yo".

La impulsividad normalmente se dirige a áreas que pueden ser potencialmente perjudiciales para la persona.

Es común tener gestos, comportamientos o amenazas frecuentes de suicidio o aún comportamientos automutilantes.

Son inestables en la afectividad por tener un humor muy reactivo. También presentan sentimientos de vacío crónicos, además de dificultad de controlar la rabia, que suele ser intensa o inadecuada.

Trastorno de la personalidad histriónica

Presentan emotividad exagerada y buscan constantemente la atención de los demás. Cuando no son el centro de atención, sienten molestias.

El comportamiento con respecto a los demás es a menudo inadecuado, a menudo seductor o provocador sexualmente, usando constantemente la belleza y el cuerpo para llamar la atención.

Los discursos de personas con trastorno de personalidad histriónica son muy impresionistas pero con falta de detalles. Estos pacientes son dramáticos, teatrales y se expresan emocionalmente de forma exagerada.

También son fácilmente influenciables por los demás o por las situaciones, además de considerar las relaciones más cercanas de lo que en verdad son.

Trastorno de la Personalidad Narcisista

Los narcisistas manifiestan comportamientos o fantasías de grandeza, con necesidad excesiva de ser admirados.

Son personas con ideas grandiosas acerca de ellas mismas, se consideran importantes y quieren ser reconocidas, exagerando sus logros y talentos.

El trastorno de personalidad narcisista se caracteriza también por fantasías de éxito, inteligencia, poder y belleza ilimitadas o aún un amor ideal.

Los narcisistas creen que son especiales y únicos y que sólo pueden ser comprendidos o deben asociarse a personas o entidades diferenciadas. Manifestan arrogancia e insolencia en sus actos y comportamientos.

También son presuntuosos, es decir, esperan recibir tratamientos favorables y especiales a sí mismos o una obediencia casi instantánea en lo que quieren.

En las relaciones personales son exploradores, tomando ventaja sobre los demás para alcanzar sus objetivos. También demuestran falta de empatía, es decir, no se identifican con los sentimientos de los demás o no reconocen las necesidades ajenas.

Es común sentir envidia de los demás al creer que los demás sienten envidia de ellos.

Trastorno de la personalidad dependiente

Las personas con este trastorno tienen una necesidad excesiva de ser cuidadas en todos los aspectos, llevando a un comportamiento sumiso y con miedo de separación. Necesitan que los demás asuman el control sobre las áreas más importantes de su vida.

Cuando están solos se sienten desamparados e incómodos, pues creen que son incapaces de cuidar de ellos mismos. Se presentan preocupaciones y miedos irrealistas de ser abandonados y quedar desamparados.

Estos individuos tienen dificultad para tomar decisiones cotidianas y siempre necesitan muchos consejos y orientaciones de terceros.

Tienen dificultad para manifestar opiniones o posiciones que discrepan de los demás, debido al temor de perder la aprobación o el apoyo.

Por tener poca autoconfianza, difícilmente tienen iniciativa de comenzar proyectos o realizar alguna cosa solos. No les falta voluntad, motivación o energía, pero se juzgan incapaces.

Puede ofrecerse para hacer cosas extremas y desagradables, sólo para recibir apoyo y cariño.

Las personas con este tipo de trastorno de personalidad buscan rápidamente una nueva relación cuando una relación íntima es interrumpida, en busca de amparo y cariño.

Trastorno de la Personalidad Esquiva

Son inhibidos socialmente, con sentimientos de inadecuación y excesiva sensibilidad a las evaluaciones negativas. Por eso, evitan actividades que tengan contacto directo con otras personas, por miedo de ser criticadas o desaprobadas.

Difícilmente se involucran con alguien antes de estar seguros de que el otro la estima. Se reservan en las relaciones afectivas debido al miedo de ser ridiculizados o pasar vergüenza.

Los individuos con este tipo de trastorno de personalidad creen que son socialmente ineptos, sin cualidades personales o inferiores.

El temor excesivo de vergüenza también los deja extremadamente reacios en comenzar nuevas actividades o asumir riesgos.

Trastorno de la personalidad obsesivo-compulsiva

Los obsesivos-compulsivos presentan una preocupación exagerada con la organización, son perfeccionistas. Estas personas se preocupan por detalles, listas, reglas, orden, organización o horarios, que pierden el objetivo principal de sus tareas.

El perfeccionismo obstaculiza la realización de las tareas de los individuos con ese tipo de trastorno de personalidad. Son personas extremadamente dedicadas al trabajo ya la productividad, dejando de lado la convivencia social, el ocio y los amigos.

Los obsesivos-compulsivos son muy conscientes, escrupulosos e inflexibles en asuntos morales, éticos o de valores, además de ser rígidos y tercos.

Tienen tendencia a guardar objetos que ya no sirven para nada, aunque no tengan conexión emocional con los mismos.

Son reacias a trabajar en equipo y delegar tareas, excepto en los casos en que las cosas se hacen exactamente como lo desean.

También ven el dinero como algo que debe ser guardado para una emergencia y por eso gastan siempre lo mínimo posible, tanto con ellos mismos como con los demás.

Hay también individuos con trastornos mixtos de personalidad, con características de varios tipos de trastornos de personalidad.

El médico psiquiatra es el especialista indicado para diagnosticar y orientar el tratamiento de los trastornos de personalidad.

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