Lupus eritematoso discoide es una enfermedad inflamatoria crónica que afecta apiel. El lupus es una enfermedad autoinmune, lo que significa que el cuerpo produce anticuerpos que atacan el propio organismo. Su causa es desconocida, pero se sabe que está relacionada con factores genéticos, siendo más común en las mujeres.
Los síntomas del lupus discoide se caracterizan por manchas redondeadas y rojizas en la piel, con bordes bien definidos. Pueden surgir lesiones similares a las espinas y placas rojas que rápidamente se quedan con el aspecto de una piel muy áspera.
Las lesiones generalmente evolucionan con enrojecimiento y pigmentación en los bordes. El centro tiende a quedar más claro, como una cicatriz atrofiada. En una fase más avanzada del lupus discoide, estas lesiones pueden fusionarse y formar extenso áreas de cicatriz en la piel.
Los lugares más afectados por el lupus discoide son la cara, el cuero cabelludo, las orejas, el tórax, y las partes expuestas de los brazos. Las lesiones también pueden ocurrir en las mucosas de la boca, nariz, ojos y órgano genital.
El lupus discoide es la forma más común de lupus eritematoso cutáneo. La enfermedad normalmente no afecta a los órganos internos y se restringe a la piel. Sin embargo, con el tiempo, puede haber acometimiento de órganos internos y evolucionar hacia lupus eritematoso sistémico en algunos casos.
Más información en: Lupus, ¿qué es?
Los médicos reumatólogos y dermatólogos son los especialistas involucrados en el diagnóstico y tratamiento del lupus discoide.
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