la síntomas de una costilla quebrada pueden ser los siguientes:
- Dolor (leve a intensa);
- y sensibilidad en el lugar de la lesión, incluso al moverse (girar el cuerpo), respirar profundamente, reír, toser o presionar la región torácica acometida.
Cuando hay solamente una fractura simple de costilla, sin comprometimiento de la respiración y sin lesiones de órganos internos, el tratamiento se basa en el uso de medicamentos para el dolor, evitar ejercicios físicos y realización de ejercicios respiratorios. La consolidación ocurre después de tres a seis semanas.
Las fracturas de costillas pueden estar acompañadas de lesiones en órganos internos, dependiendo de qué costilla se rompió. Las fracturas en costillas superiores pueden causar lesiones en grandes vasos o nervios, las localizadas en el medio del tórax pueden alcanzar los pulmones y las inferiores pueden causar lesiones de órganos como el bazo y el hígado, siendo necesario a menudo algún tipo de cirugía para su tratamiento. Los síntomas, en este caso, serán mucho más evidentes, pudiendo haber falta de aire, desmayos, palidez, dolor intenso, entre otros.
En caso de trauma en tórax, especialmente en la sospechosa de fracturas, un médico clínico general o preferentemente un ortopedista deberá ser consultado. Se evaluará el tipo de fractura que ocurrió (si existe), si hubo lesión en órganos internos y si hay necesidad de algún procedimiento quirúrgico.
